La economía mexicana habría registrado un crecimiento en agosto de 2024, con lo cual continúa su tendencia positiva por cuarto mes consecutivo, según las proyecciones más recientes del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI). El Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) anticipa un avance mensual del 0.3% en el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) durante agosto, con estimación al alza para julio de un -0.1% a un 0.1%.
Este crecimiento es impulsado principalmente por el dinamismo de los dos grandes sectores de la economía nacional: la industria y los servicios. En agosto el industrial habría registrado un incremento mensual estimado de 0.3%, mejorando su desempeño tras el avance de 0.2% observado en julio. Mientras tanto, el de servicios, que representa una parte crucial de la actividad económica, habría crecido un 0.4%, revirtiendo la caída del 0.1% estimada en el mes anterior.
El IOAE también pronostica un aumento anual del 1.1% en la actividad económica general, basado en cifras ajustadas por estacionalidad. En particular se espera que las actividades industriales crezcan un 0.7% interanual, mientras que el sector servicios habría aumentado un 1.5% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El IOAE es una herramienta clave para obtener una visión anticipada sobre la evolución económica del país. Mientras que los datos oficiales del IGAE suelen publicarse alrededor de ocho semanas después del mes de referencia, el IOAE adelanta estas estimaciones cinco semanas, para proporcionar una perspectiva temprana y valiosa que ayude a entender el desempeño económico.
Crecimiento económico refleja dinamismo en sectores productivos
El crecimiento económico observado en los últimos meses refleja el esfuerzo de recuperación y dinamismo en diversos sectores productivos, impulsado por la demanda interna y la estabilidad en las actividades industriales y de servicios. Sin embargo, la situación sigue siendo sensible a factores tanto internos como externos, por lo que la vigilancia y el análisis continuarán siendo fundamentales para seguir el rumbo de la economía mexicana.
La expectativa de crecimiento para el resto del año se mantiene positiva, aunque el entorno global y las posibles variaciones en la demanda interna podrían influir en las próximas estimaciones.