Caty Monreal Pérez es una reconocida activista en favor de las mujeres y las personas con discapacidad. Desde muy joven tuvo una conciencia sobre los problemas de nuestro país. Sus padres le enseñaron la vocación del servicio, y siempre ha participado en causas sociales en favor de los que menos tienen.
Fue con el nacimiento de sus hijos, Sergio y Eva, que esta vocación se focalizó en que había que trabajar para sanar heridas de la discriminación; en empoderar a niñas y mujeres y, sobre todo, por reivindicar los derechos de las personas con discapacidad. Así es como nació Rosa Mexicano, su asociación civil con presencia nacional, que ha implementado diversas acciones para sanar el tejido social.
Por su preparación académica sabe que, además de políticas públicas y marcos normativos, es necesario implementar acciones directas en beneficio de la ciudadanía, por lo que acostumbra caminar e ir directamente con la gente para implementar capacitaciones, realizar jornadas de salud y actividades culturales con niños y niñas.
Poner el corazón en la ciudad de Cuahtémoc
Como vecina de la alcaldía Cuauhtémoc y presidenta de Rosa Mexicano ha visitado y recorrido todas sus colonias, por lo que tiene un diagnóstico claro de sus retos y soluciones. Sabe que la alcaldía tiene tres problemas fundamentales: seguridad, servicios urbanos y empleo. El trabajo de las asociaciones civiles debe ser estratégico, así que se ha enfocado en sanar heridas de la discriminación y ponerle corazón a la Cuauhtémoc.
Además de las pláticas y cursos de empoderamiento que se han dado en la demarcación, ha impulsado que las propias vecinas hablen de sus situaciones de violencia de género y dialoguen en torno a las maneras de resolverlas. Asimismo, ha puesto en marcha importantes jornadas de salud. Esto sobre todo en zonas en que el acceso a los sistemas de seguridad social es limitado.
Sanar a la Cuauhtémoc es un proceso de raíz. Con estas acciones Caty Monreal y Rosa Mexicano esperan sanar el corazón de la ciudad.