El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció este viernes una noticia esperanzadora para los trabajadores que se jubilen bajo el régimen del 97, quienes comenzarán a recibir su primera compensación del Fondo de Pensiones para el Bienestar a partir del 1 de julio de este año. Esta medida busca corregir desbalances históricos en el sistema mexicano de pensiones y garantizar una vejez digna para miles de trabajadores.
El mandatario señaló que se espera que la reforma necesaria para este cambio sea publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) en los próximos días, y que el 1 de mayo se definan las reglas de operación del fondo, así como la creación del fideicomiso que lo gestionará.
El Senado de la República aprueba las Pensiones para el Bienestar
El Fondo de Pensiones para el Bienestar, que fue aprobado por el pleno del Senado de la República este jueves, estará financiado con 40 mil millones de pesos, provenientes de diversas fuentes. Entre ellas, los ahorros de personas mayores de 70 años cuyas cuentas en las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) están inactivas y no han sido reclamadas, una porción de los ingresos del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, además de las utilidades generadas por proyectos gubernamentales como el Tren Maya y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
El presidente recordó que durante los gobiernos de Ernesto Zedillo y Felipe Calderón se modificó la Constitución para alterar el esquema de pensiones, dando paso a la creación de las Afores en 1997 lo que, según dijo, privatizó el manejo de las pensiones que anteriormente estaba en manos del Gobierno. “Fue una forma de privatizarlas», afirmó Andrés Manuel López Obrador.
Esto significó para muchos trabajadores una disminución en sus ingresos al momento de jubilarse, una situación que el actual gobierno busca remediar con el nuevo Fondo. López Obrador explicó que el Fondo de Pensiones para el Bienestar busca asegurar que las pensiones sean equivalentes al último salario recibido por los trabajadores, sin superar un tope máximo de 16,777.78 pesos mensuales.
«Se va a informar sobre el procedimiento de cómo un trabajador que se va a jubilar con las leyes anteriores y que va a recibir menos, cómo se le va a compensar con el Fondo de Pensiones para el Bienestar. Nos va a llevar algún tiempo, espero que en un mes después del día primero de mayo, primero de julio si podemos, este cobrando su compensación el primer trabajador, ese es mi plan”. Indicó el presidente, destacando que el objetivo es que no haya trabajadores en desventaja debido a la época en que contribuyeron.
La reforma ha sido recibida con optimismo por los sectores afectados, especialmente aquellos trabajadores cercanos a la jubilación que temían no contar con suficientes recursos para sostener su calidad de vida tras dejar la vida laboral. Sin embargo, también ha generado debate entre expertos en economía y pensiones, quienes discuten la viabilidad a largo plazo del fondo y sus fuentes de financiamiento.
Este esfuerzo por reformar el sistema de pensiones subraya la necesidad de adaptar viejos modelos a las realidades demográficas y económicas actuales de México. Además, resalta la intención del gobierno de AMLO de priorizar el bienestar social sobre modelos económicos que, según él, han perjudicado a la clase trabajadora del país.
Con la implementación de estas medidas el gobierno de López Obrador no solo busca ofrecer un alivio inmediato a los jubilados, sino también sentar las bases para un sistema de pensiones más justo y equitativo, que beneficie a futuras generaciones. Ahora los ojos estarán puestos en la publicación de las reglas de operación en mayo y la efectiva puesta en marcha del fideicomiso, que podría cambiar la forma en que México gestiona el bienestar de sus ciudadanos en la vejez.