Rocío Nahle, una veracruzana de izquierda y de resultados

Madre, profesionista, esposa, hija, hermana, militante, veracruzana, pero sobre todo mujer de izquierda y de resultados, así es Rocío Nahle García, quien en entrevista exclusiva para P4TRIOTAS nos muestra su esencia, espíritu y personalidad. Esta es la mujer que consolidará la transformación de Veracruz.

La Cuarta Transformación es un cambio, esa es la palabra, ¿y por qué la Cuarta Transformación? El presidente lo explica muy seguido para que toda la población hagamos memoria de la historia. En México ha habido tres transformaciones sociales: la Independencia, la Reforma y la Revolución.

Actualmente se lleva a cabo lo que conocemos como Cuarta Transformación, que implica un cambio de régimen para erradicar el neoliberalismo que durante 35 años llevó a cabo el desmantelamiento del Estado.

Ahora se fortalece al estado con políticas públicas y programas sociales diferentes, donde ya no mandan ni ejercen control poderes fácticos.  Esa es la Cuarta Transformación. Para mí es un privilegio, un honor y una gran responsabilidad el haber estado en una Secretaría como la de Energía, trabajando en la transformación del país, en este cambio.

Bueno, yo tengo dos hijas, Rocío, la más grande, y Tania, la más chica. Ambas son mujeres hechas y derechas. Rocío nació el 8 de marzo, exactamente el Día Internacional de la Mujer. Soy una mujer muy afortunada porque he podido consolidar una familia. 

Yo llegué a Veracruz hace 35 años. A Veracruz le debo todo, todo lo que soy. Cuando me dicen “de dónde eres” yo digo que de Veracruz, tú eres de donde te haces, claro, nací en otro lugar sí, nací en Zacatecas, pero soy de Veracruz, yo llegué aquí joven, de 22 años, acababa de salir de la universidad y llegué a trabajar. Yo a Veracruz vine a darle trabajo, a hacer un hogar, me casé con un jarocho cuenqueño. Mis hijas nacieron en Coatzacoalcos y he podido consolidar una familia.

Somos una familia de Ingenieros, o sea, hay familias de dentistas, hay familias de comerciantes, hay familias de médicos, bueno, yo tengo la fortuna de tener una familia de ingenieros. Estoy feliz, mis hijas estudiaron, me apoyan muchísimo, me comprenden por el tiempo porque a veces me hablan por teléfono y ni siquiera les puedo contestar, porque estoy ocupada y salgo, y a veces es para temas como mamá: “oye, mamá, fíjate…” 

Mi vida es tan normal, en Navidad preparo mis cenas familiares, mi vida es normal. Yo valoro, respeto y admiro a aquellas madres que se forjan para salir todos los días y dejan a sus pequeños. Bueno, yo pude acomodarme y estuve en la crianza de ellas  y ya después me reintegre —ya cuando mis hijas estuvieron en secundaria— me volví a reintegrar, a la investigación, al trabajo, al tema energético y, sobre todo, ya combinándolo con política.

Conocí al presidente Andrés Manuel López Obrador en el 96. Ya estaba la defensa de Pemex, porque fue cuando Carlos Salinas de Gortari dijo, “vamos a privatizar la petroquímica”, y el licenciado Andrés Manuel López Obrador andaba con el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, y nosotros en Coatzacoalcos, los técnicos y profesionistas nos reuníamos con ellos. Así empecé en la introducción de la política y del activismo.

La izquierda mexicana es fantástica, porque hay que irnos hasta atrás, hasta donde empieza México. Se hablaba de la Reforma, se hablaba de la Independencia, se hablaba de la Revolución, se da entre luchas de clases: una clase pudiente con una marginada, pero no nada más es el rico y el pobre sino una ideología de justicia, de justicia social, de una lucha de igualdad, de nuestra cultura mexicana, nuestras raíces aztecas, mayas, olmecas, indígenas.

Cuando tú dices izquierda mexicana siempre es un trabajo por una visión social igualitaria, no de un pleito entre el rubio y el moreno, no es entre el rico y el pobre. Hay gente de izquierda que tiene posibilidades económicas altas, qué bueno, pero su ideología es de justicia social. Esa es la base. 

Hay una derecha, voy así decirlo con todo el respeto, porque también se vale ser de derecha, también se vale que piensen diferente, está bien. Cuando hay un trabajo de comunicación, cuando hay diálogo, cuando es saber dónde encontramos puntos afines para el bien común, tú puedes pensar en blanco y tú puedes pensar negro, pero si al final de cuentas el punto afín es el bien común, ¡qué bueno!

La izquierda mexicana ha venido de una izquierda radical a tener una izquierda progresista, hoy estamos en una izquierda progresista. Dice el presidente: “soy un radical porque me voy a sembrar o me voy a anclar en un cambio radical en un cambio de raíz”. Tenemos que hacer un gobierno progresista, que es lo que estamos restaurando. Es muy interesante la historia de la izquierda mexicana.

Cuando a mí me preguntan, porque me lo han dicho varias veces, ¿Veracruz?: ¡mi corazón! Imagínate esta tierra bendita que ha recibido en la historia del país a todos, o sea, nuestro puerto, el Golfo. Recibió españoles, recibió libaneses, recibió alemanes. Es una tierra tan noble que recibe a todos. Yo te comentaba, llegué hace 35 años.

Veracruz es mi corazón: me ha dado una familia, me ha dado hogar, me ha dado trabajo, me ha dado confianza para representar Coatzacoalcos, para representar a mí estado en el Senado, entonces a Veracruz yo lo único que puedo darle es el corazón porque es mucho, es mucho esta tierra noble que recibe a todos, a todos, a todos.

A veces se nos olvida la función estelar que tiene Veracruz en México. O sea, México no se puede escribir sin la “V” de Veracruz. El presidente Andrés Manuel López Obrador dice que Veracruz es una república porque tiene todo, tiene tanta riqueza, pero sobre todo el veracruzano es gente noble; vamos al sur y la gente del Istmo, esa mezcla de cultura que tenemos en el sur con gran ascendencia; la gente istmeña de Oaxaca, nuestra comida  y con la vecindad de Tabasco es una mezcla cultural muy rica y si vamos al norte, a Tuxpan, Poza Rica, Pánuco, también la mezcla de la Huasteca, la Cuenca y los Tuxtlas es un corazón. 

Ser veracruzano es un lujo, esa es la palabra. No es un orgullo, es un lujo. Entonces pues yo aquí estoy, aquí estaré y aquí me moriré. Esta es mi tierra. Yo soy veracruzana por convicción, no por obligación. 

Yo siempre en política todas las cosas las tomo positivas, te fortalecen. Soy una mujer de retos y una mujer de trabajo. Siempre trabajo porque como mujer tienes que dar resultados para poder ascender, para poder sobresalir, para poder escalar, y para poder dar resultados necesitas trabajar porque mientras nada más estás ahí en el golpeteo no pasas de eso, por eso siempre tenemos que ver hacia adelante.

Cuando hay críticas que son muy válidas, cuando hay señalamientos o diferencias que son muy válidas, está bien, se toman como lo que son, pero no te concentras en eso. Si te concentras en eso no avanzas. Hay que trabajar, hay que ver para adelante y, lo más importante, siempre tratar de hacer lo correcto en la vida, porque yo creo que la vida te responde cuando haces las cosas mal o cuando haces lo incorrecto. Yo le tengo mucho respeto a la gente y al pueblo, y el pueblo sabe cuando haces las cosas bien y el pueblo sabe cuando estás haciendo las cosas mal.

Esta es una entrevista donde quiero comentar que me han dado muchísimo tiempo para hablar de muchas cosas que nunca se hablan y me encanta hacerlo en Veracruz. Creo que sería el único lugar en donde podrías hacer este tipo de entrevista porque me debo a los veracruzanos, porque soy senadora con licencia, porque tienen que saber de mí en todos los demás estados que voy, porque hablo nada más de lo energético, claro, pero bueno, las mujeres, a mí me encanta ser mujer, me encanta ser solidaria con ellas, con todas las mujeres, creo mucho en ellas, le han puesto mucho impulso las mujeres.

Creo en la equidad, la equidad es ni más ni menos. No se trata de que seamos más que los varones, sino tener las mismas oportunidades y, para ello, las mujeres tenemos que trabajar mucho. Tenemos que dar el doble, tenemos que prepararnos, pero las mujeres somos fantásticas porque tenemos este poder de hacer varias cosas al mismo tiempo, de estar en varias situaciones al mismo tiempo, de ser más dinámicas.

Las mujeres también podemos sentarnos en una mesa a discutir, a negociar a debatir, tenemos capacidades, y hoy las mujeres en México hemos avanzado muchísimo, somos de los primeros países en el ranking mundial en equidad en tan poco tiempo, porque en los últimos años hemos avanzado mucho. Somos el 50% de diputadas y 50% de senadoras. Hoy tenemos ya gobernadoras, y un gabinete presidencial que nunca había tenido la mitad de mujeres, que además ocupan secretarías muy interesantes como la de Seguridad, Hacienda, así como Energía, entonces es bastante interesante.

Yo voy a hablar de las mujeres, de las mujeres de la casa a las que no se les reconoce, porque la mujer es el núcleo del hogar. La mujer trabaja en su casa, trabaja con los hijos, trabaja muchas veces fuera de casa en un empleo. Cuando no está la mujer, cuando desgraciadamente falta la mujer, hay una descomposición social en gran parte del núcleo, entonces la mujer en el núcleo social en la familia, y es desde ahí donde hay que reconocernos donde hay que empoderarnos.

Hace un momento decías las mujeres son cabeza de todo y núcleo de todo, el mensaje a estas mujeres que te están escuchando. Ahora 32 años de casada implican una familia y obviamente un aguante como mujer y como pareja porque no es cualquier cosa una relación, y menos un matrimonio y dos hijas.

Como secretaria dejaste también un tiempo para comunicarte con ellas, iniciaste un movimiento, o más bien fuiste parte de un activismo o eres parte de una administración federal con un encargo bastante complejo, pero muchas mujeres quieren crecer y muchas mujeres quieren hacer, desde las jovencitas hasta mujeres que hoy seguramente alguna nos está escuchando tiene el agua, no en el cuello, sino hasta arriba y qué les puedes decir porque finalmente todos estos casos como el tuyo son ejemplos de vida.

Son etapas, yo tuve la etapa de estudiante, después la etapa de profesionista, estuve trabajando en Pemex en los complejos petroquímicos. Luego viene la etapa de esposa y madre y como ya te lo comenté, tuve la fortuna y pude dedicarme a mis hijas. Fue una etapa muy feliz, 33 años de matrimonio como cualquier matrimonio con problemas, con diferencias, con afectos y con unión.

Si, también como cualquier matrimonio, como uno de los que me están escuchando con altas, con bajas, con diferencias, pero bueno consolidando siempre a la familia; pudimos hacerlo mi esposo y yo y ya son 33 años, después de madre, después de esposa, activista, política, diputada, senadora, ahora secretaria, son etapas. La vida te va llevando y todo en la vida lleva tiempo, la maduración, la palabra senador viene del griego de cenitud y era el senador senectud porque era la experiencia, era la maduración así allá con los griegos.

Bueno, aquí todas las etapas las he ido viviendo, con el tiempo madurando. Hay gente que de la noche a la mañana llega a un puesto y está bien, qué bueno, felicidades y a mí no, a mí todo me ha costado tiempo, todo me ha costado madurez, pasar de una etapa a otra y creo que así es y en esa etapa a otra, pues he tenido 33 años de matrimonio como cualquier mujer, cualquiera que me esté escuchando, igual de ama de casa, de ir a ver víveres, de hacer comida, de atender un hogar, como cualquier mujer. Como cualquier mujer me ha tocado vivir y son etapas y hoy estoy en esta etapa.

Él en el 2000 llegó al Gobierno de la Ciudad de México y nosotros en Coatzacoalcos estuvimos trabajando en la campaña, la tercera campaña del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas y, posteriormente, ya en el 2003, 2004,  estuvimos muy cerca del presidente, del ahora presidente, y viene la primera elección, que fue en el 2006, y ahí a mí me nombra de coordinadora del distrito de Coatzacoalcos, de su campaña presidencial. Entonces yo coordiné su campaña en el 2006 en Coatzacoalcos.

Posteriormente, en el 2008, cuando presentan una reforma al sector energético, la primera que presentó Felipe Calderón, se hicieron debates en el Senado y formamos grupos en los diferentes estados petroleros y a mí me nombra dentro de la Coordinación de Veracruz el presidente Andrés Manuel y estuvimos trabajando. Luego, en el 2012, fui candidata a diputada federal cuando él fue candidato a presidente de la República por la coalición del PRD y luego en el 2013, estoy en el Senado de la República como asesora viendo lo de la Reforma y en el 2015, que fue la primera elección de Morena, y participo nuevamente para diputada federal en Coatzacoalcos por Morena.

Andrés Manuel López Obrador es un hombre con ideología, con un proyecto de nación firme, con un gran y profundo amor al pueblo de México, yo creo que eso es lo que lo mueve todos los días; a las 6 de la mañana, ese hombre ya está en la oficina trabajando y son las nueve de la noche y sigue trabajando. Trabaja y es un gran líder, es nuestro presidente y yo deseo que le vaya muy bien a él para que nos vaya muy bien a los mexicanos.

Sin duda Dos Bocas es el proyecto profesional más grande que tuve y que la vida me ha dado y que yo creo que después de Dos Bocas, como técnica como ingeniera, pues va a ser todo. Después de Dos Bocas puedo hacer todo como ingeniera, yo creo que cualquier ingeniero sabe de lo que estoy hablando; es un sueño y el tener la oportunidad de haber coordinado este gran proyecto con puros mexicanos es una experiencia, una oportunidad. Esto es maravilloso. Esto es maravilloso y, además, es para México.

Bueno, ya platicamos de todo, pero ya por último, la política es todo y ya para cerrar, la política te lleva a conocer al presidente actual en su momento, y te lleva a diferentes espacios y te define en varios momentos de tu vida.

La política es muy apasionante. Yo creo que todos los seres humanos tenemos algo dentro de nosotros en política porque con la política resuelves, con la política dialogas, con la política trabajas, con la política construyes. Y tú defines qué tipo de política quieres hacer si es constructiva, si es para trabajar por el bien común, si es de interés personal, porque hay diferentes, la política viene entendida exactamente, entonces, soy afortunada porque en todos estos años, o sea, tengo 20 años en política trabajando como activista dentro del tema y el trabajo ya de postulación política como un trabajo externo. 

Tengo 10 años trabajando y eso te va madurando, también la política te va madurando. Cuando llegas a un cargo con qué ánimos llegas, cómo lo vas a desempeñar. Cómo lo vas trabajando, cómo lo vas llevando y cómo vas conociendo tu comunidad, tu entorno, tu país, eso es madurez.

Yo estoy feliz de estar en este momento. Vengo de una lucha con el presidente López Obrador para cambiar la situación del país. Siempre fue de retos, siempre fue en contracorrientes, siempre fue en contra del régimen. Esto no es nuevo.

Ahora estamos  en esto, ahora es tiempo de resultados, por eso mi trabajo diario en Dos Bocas, en las refinerías, en la política energética, porque venimos a esto, a dar resultados, esa es la política. Eso es algo donde nos lleva y pues estoy feliz y además en mi estado súper bien; pasé todo un examen aquí en una tómbola, que me puso Adriana, pero quiero decirte que lo disfruté, me gusta porque son temas de los que nunca hablo.