El béisbol en México es muy popular en ciertas entidades, el cual recientemente cobró fuerza y relevancia a nivel nacional. Sin embargo, pocas personas conocen sus orígenes en nuestro país.
Al respecto hay varias versiones de dónde y cómo surgió, sin embargo, la más antigua se remonta a la segunda mitad del siglo XIX, en Matamoros, Tamaulipas, cuando el 10 de diciembre de 1868, el Rio Grande Base Ball Club de Brownsville, Texas, retó, a través de la prensa local, en el periódico Brownsville Ranchero, al club de Matamoros a un encuentro de beisbol, mismo que respondió por la misma vía, a través del capitán del equipo, José F. Medrano, de manera afirmativa para jugar un partido por el campeonato del Río Grande.
En la publicación del Union Base Ball Club —nombre de la novena matamorense— en el Brownsville Ranchero, signada por Medrano, se lee que el encuentro se llevaría a cabo el día 25 de diciembre de 1868, en el campo del equipo retador, y que lo que estaría en juego sería ni más ni menos que una pelota de beisbol, que en ese entonces era prácticamente imposible de encontrar en la localidad tamaulipeca, y que se estilaba entregar como trofeo al equipo vencedor de los encuentros.
“Yo, el abajo firmante, como capitán de la primera novena del Unión Base Ball Club, y a nombre de la novena, acepto su reto del día 9 pasado, para jugar un match de beisbol el 25 del presente a las 9 de la mañana en sus campos. Pero en el entendido de que, si ustedes nos vencen, nosotros tendremos que darles una pelota vieja o el precio equivalente a una nueva, pues aquí no podemos encontrar ninguna. Jugaremos de acuerdo a las reglas y regulaciones adoptadas en 1866 por la Convención de Nueva York”.
El encuentro se llevó a cabo en la fecha pactada con el resultado favorable para el Union Base Ball Club, de Matamoros, por marcador de 49 a 32, sobre el Rio Grande Base Ball Club de Brownsville, que cumplió con el compromiso de entregar una pelota nueva a la novena mexicana, en reconocimiento de su victoria.
La relevancia del triunfo estriba en que se trató de un hecho histórico, debido a que, a saber, ningún equipo latinoamericano se había enfrentado a uno estadounidense. En su crónica deportiva, el Brownsville Ranchero consigna que “todo ocurrió de forma placentera, ninguna falta se encontró en las prontas decisiones del umpire, y vencedores y vencidos se retiraron a una suntuosa comida organizada por el Rio Grande Club”.
No obstante, la victoria de la novena mexicana obedeció a que varios de sus jugadores se habían formado como beisbolistas en Estados Unidos, cuando fueron estudiantes en distintas instituciones de Nueva York y Nueva Jersey, deporte que llevaron a sus localidades de origen, al igual que estudiantes de otros países, como Cuba.
El béisbol en México contemporáneo
Hoy en día, el beisbol en México ha cobrado gran relevancia, al grado de que muchos jugadores que han desfilado por las grandes ligas son de origen mexicano, como es el caso de Fernando Valenzuela, Teodoro Higuera, Vinicio Castilla y Aurelio Rodríguez, entre muchos otros que han puesto en alto el nombre de nuestro país en ese deporte.
Asimismo, el béisbol ha recibido un gran impulso en los últimos años con la construcción y/o rehabilitación de estadios para su práctica, con lo que ha crecido la afición tanto para presenciar los encuentros como para practicar el juego.